Hasta aquí hemos llegado con este especial de Navidad.
Para mi última canción, vuelvo a casa. Y no me refiero sólo a España. A mi Madrid. ¿Por qué será que cuando uno bucea en sus recuerdos de Navidad parece inevitable volver a la infancia? En mi caso, recordar esos villancicos que sonaban en casa. Tímidamente. Pero sonaban.
Esas pocas veces en que mi madre se arrancaba a cantar alguno. Después del de Los Peces en el Rio, casi siempre de modo inevitable caía el Ya Viene la Vieja. En su trastero de la memoria se ve que habitaba ese villancico. No es de los más cantados habitualmente. Pero a mí me hace gracia y, sobre todo, me lleva a mi trastero de la memoria.
Probablemente se irá aparcando con los años entre las canciones elegidas por la gente para cantar en estas fechas. Y es que su letra no pasa el terrible filtro de lo correcto ya.
«Ya viene la vieja«….hmmm, no. No es una frase acertada.
«Ya viene con el aguinaldo. Le parece mucho, le viene quitando«.
Encima de ser una persona de más edad va robando las perrillas sueltas. Hmmm…. no. Definitivamente me temo que este villancico irá dando paso a otros con un lenguaje más correcto.