Se trata de una versión acaramelada pero maravillosa de la habanera Veinte Años.
Al cantante le molesta bastante que la gente piense que es una canción de celebración.
Personalmente, mi canción favorita en lo que va del año 2021.
Aretha Franklin demuestra aquí sus raíces religiosas que nunca abandonó.
Una voz maravillosa, unas canciones rompedoras y un estilo muy personal.