Para la versión de esta semana he pedido ayuda a mi experta en reggae a domicilio, Berta, mi mujer. Ella ha sido la encargada de elegir la versión, que no es otra que la de Gilberto Gil. No todos los días tiene uno a todo un ministro de cultura versionando a Bob Marley. Gilberto tiene en común con aquel su intensa actividad política en defensa de los derechos de los afrobrasileños y de los trabajadores y las clases desfavorecidas. También es, como Bob Marley, un estandarte de la música popular, mezclando influencias del rock y el reggae con raíces brasileñas, constituyendo el corazón movimiento musical llamado Tropicalismo, junto a Caetano Veloso y Maria Bethania.
Berta me recuerda que Gilberto Gil ha estado en la cárcel, ha tocado con medio mundo, lleva décadas haciendo música y es una figura indiscutible, no solo de la música, sino de la cultura universal. Gilberto Gil dejó la política explicando que la labor de los políticos no es hacer cultura, sino hacer que la cultura llegue a todos los rincones del planeta.