Sólo con su voz se puede entender y llegar incluso a tocar esa paz que parece que sale de su garganta.
En 1990 George Michael decide acabar con la mentira. Y compone una declaración abierta en forma de canción.
La letra abre una mano tendida a la esperanza, al final de una pesadilla.
Sin saberlo y casi sin quererlo, en 1940 ese joven llamado Woody Guthrie había hecho historia.
Esta versión resume en su creación todo aquello de lo que rezuma Mediterráneo.
Los espectáculos de Sondheim reflejaban su inquieta curiosidad por la naturaleza humana.