Su autor original, Reznor elogió la interpretación de Cash llegando incluso a decir "esa canción ya no es mía".
Musicalmente es una canción escoba. Te barre y te barre junto con su ritmo irresistible y sus armonías melosas.
Por un momento me puse a flotar y esa canción dejó de ser mera música de fondo.
Para los que os gusta fumar seguro que entendéis perfectamente el tándem de sustancias altamente adictivas.
Se necesita una mente abierta para entender cómo una niña pequeña puede tomar estrellas de mar y café para el desayuno.