El pasado 3 de febrero la artista londinense Rachel Agatha Keen, conocida como Raye publicaba su nuevo sencillo The Thrill is Gone. Una pista que cuenta la historia de un fuego moribundo. La historia de cuando una se vuelve aburrida y predecible y otro frío y despectivo.
Me encanta como arranca la pista con un estilo rap que transmite de forma clara y realista una historia como si se la estuviera contando a una amiga o amigo.
The Thrill Is Gone me trae inmediatamente a la mente las pistas más optimistas de Amy Winehouse, tanto a través de las inflexiones de jazz y brochazos Motown como también por la actitud vocal de importarle todo una mierda.
La repetición de la frase The Thrill is Gone y su uso en el título de la canción es un guiño al ícono del blues B.B. King, quien hizo famosa una canción con el mismo nombre en 1969. La versión de King también describe la pérdida del amor, el dolor y la soledad que asociamos con una llama emocional que se extingue. La actualización de Raye del sencillo nos lleva al B.B. King del siglo XXI, rindiéndole así un homenaje.