Iyeoka te manda una carta-poema-canción donde describe el dolor y el placer de enamorarse.
La voz de Rhiannon Giddens nos cuenta la historia de cuando todo está casi perdido, de cuando rendirse es una posibilidad real.
La canción es fealdad embellecida; y no hay muchos artistas que hagan que quieras subir el volumen y meter la cabeza bajo tierra simultáneamente.
Habla de dos temas universales: el amor y la muerte. Como Romeo y Julieta que se funden finalmente en ese abrazo de muerte y amor para siempre.
Barnett escribe letras que brillan con sarcasmo, sabiduría irónica y juegos de palabras acrobáticos.