La mejor canción de guitarra según uno de esos listados que tanto nos gustan.
Si hay algo que me gusta de una versión, es cuando se sale totalmente del camino y le da un giro inesperado.
Habla de sexo y nos lleva a un clímax envolvente para sacudirnos después con una batería legendaria.
Los de Led Zeppelin odiaban la canción. Y aquí te lo cuenta su propio creador.