Vamos a viajar a los años 60. Esos años de música soul, elegante con voces a veces de falsete. Pero, fíjate… vamos a hacerlo sin viajar en realidad a esos años. Nos vamos a quedar en este siglo. En concreto, en 2021. Es en ese año cuando un cantante llamado Aaron Frazer decide sacar su primer álbum en solitario. Hasta entonces, sí, se le podía ver actuando pero como miembro de una banda llamada Durand Jones and the Indications. Ahí lo mismo tocaba la batería que hacía voces de apoyo. Pero poca gente sabía que él era el compositor de las canciones de esta banda.
Quizás por eso era lógico y esperable que en un momento dado Aaron Frazer decidiera dar el salto y atreverse a una aventura propia ya sin el paraguas de la banda. Y para el debut, ojo, que se supo rodear bien. Su productor es Dan Auerbach, el de los Black Keys. En una semana se juntan en un estudio, contratan a unos músicos de sesión de primer nivel (como podrás notar continuación), gente curtida en esos discos que sonaban allá por los lejanos años 60 y 70. Le mete a la batidora soul, pero también algo de funk, pop y lo que haga falta. Y con una voz que recuerda lejanamente a la de Smokey Robinson, el señor Aaron Frazer logra lo que parece a veces imposible. Viajar en el tiempo sin salir de nuestra habitación ni darle la vuelta al calendario.