En un programa dedicado a canciones muy dulces, no podía faltar una banda con un nombre dulce por excelencia. SWEET. Así, a secas y en inglés. Aunque en sus orígenes se llamaron THE SWEETSHOP, la tienda de caramelos. Pero luego lo acortaron simplemente a SWEET.
Por cierto, curiosa banda y curioso nombre. Lo suyo era toda una declaración de intenciones. Porque en sus inicios hicieron música acaramelada, quizás siguiendo el ejemplo de The Archies que era un grupo ficticio de dibujos animados que hacían canciones, estas sí, pegadizas y pegajosas.
Así empezaron también SWEET con temas como “Funny, funny”. Pero luego fueron variando de estilo hasta acabar haciendo rock glam. Y entonces el espejo en el que se miraban era más el de grupos como The Who.
Todo un cambio. Que además les permitió triunfar con canciones como la que vamos a escuchar ahora. Uno de esos temas que hace MUY difícil estar pegados al suelo y no mover ni un sólo músculo. Te reto a que lo intentes. Ya te digo que no vas a poder. Porque aquí viene este…. Ballroom Blitz.