Una de las cosas que más llama la atención de los países nórdicos en general… y de Dinamarca en particular… es el tema de los impuestos. Sí, los impuestos en Dinamarca son más altos que en España. Así, mientras aquí de media se paga un 21% de impuestos sobre la nómina de un trabajador, en Dinamarca esa media sube hasta el 35 por ciento. E incluso puede llegar a alcanzar el 55% en los sueldos más altos.
A cambio, los daneses tienen una serie de ventajas que a nosotros nos pueden dar envidia. Allí, en Dinamarca, por ejemplo las universidades son gratuitas. Y no sólo no tienen que pagar por los estudios. El Estado danés paga a cada alumno universitario una paga mensual de 725 euros para que estudiar no sea un problema para nadie.
Con esto quieren animar a la gente joven a completar sus estudios universitarios. Ah y, por cierto, la tasa de paro en Dinamarca es una de las más bajas de Europa, está en el 4,4 por ciento. Nosotros en España estamos en el 11,5 por ciento.
De todos los músicos del país hay uno que desde luego no llegó a estar en paro nunca. El músico de jazz, contrabajista, Niels-Henning Ørsted Pedersen trabajó con algunas de las figuras de jazz más importantes de su época.
Se lo rifaban. Gente como Chet Baker, Dexter Gordon, el mismísimo Stephane Grappelli, el pianista Oscar Peterson, Count Basie, Stan Getz, Ella Fitzgerald… ¿sigo? La lista es impresionante. ¿Qué tenía este contrabajista danés que todos se lo rifaban?
Vamos a cerrar este repaso por la música y los músicos que nacen en Dinamarca (bueno, luego ya sabes que nos queda la moneda extra) con una muestra de jazz. Por cierto, la semana pasada tuvimos otra de esas muestras de jazz danés con la Danish Radio Big Band, que te recomiendo escuchar si no lo hiciste.
Pero ahora vamos con el cuarteto de Oscar Peterson, con Niels-Henning Ørsted Pedersen al contrabajo, además con una pieza en la que se nota especialmente su aportación y quizás así entiendas mejor qué tenía este danés que a todos gustaba… Esto es Oscar Peterson Quartet con Dancin’ Feet
