¿Sabes que te digo? Que después de este viaje o este atasco musical, te dejo las llaves de mi coche.
Sí, puedes conducir mi coche. Yo ya me he cansado.
Y ahora me pongo un baño para relajarme. Lleno bien de agua la bañera, hasta arriba de espuma. Y de fondo me acaricio los oídos con mis queridos Beatles.
Sí, hace mucho que no escuchaba una de los Beatles, así que hoy toca. ¿Cómo no voy a poner una canción de ellos esta semana? No es una semana cualquiera. Dentro de dos días estaré disfrutando del concierto de Paul McCartney en Madrid. Síiiiiiii
Así que tenía que sonar sí o sí algo de Paul o de los Beatles esta semana. Pero no van a ser ellos quienes canten esta próxima canción. No. Voy a dejar que sea una excelente versión a capella de Bobby McFerrin del clásico Drive My Car.
McFerrin, ese artista, el único diría, capaz de llenar una canción sólo con sonidos que proceden de la voz. Tú escuchas este tema sin prestar atención a los detalles y te parece que aquí suenan instrumentos. Que hay bajo, hay batería, guitarra… no falta nada. Pues no. Falta todo. Porque la voz de Boby McFerrin te ha engañado y ha puesto los instrumentos con su prodigiosa garganta.
Y las palmadas, los golpes sobre el pecho y lo que haga falta para no necesitar ni un sólo instrumento. Pero a la vez, hacerte creer que están todos. Así de genio es… y sino me crees escucha este Drive My Car
Puedes escuchar esta canción y el resto del programa a través de la aplicación iVoox