Antes de que la artista de Melbourne fuera aclamada por la crítica, Courtney Barnett usó el dinero que le pidió prestado a su abuela para comenzar su propio sello discográfico, Milk! Records, en el que lanzó sus dos primeros EP, I’ve got a friend called Emily Farris y How to Carve A Carrot Into a Rose. Esa fue su pista de despegue en una aventura que la llevó a su aclamado álbum Sometimes I Sit and Think, and Sometimes I Just Sit.
En 2016 publicaba un sencillo titulado Three Packs a Day… que comienza con la cuenta hacia adelante de 1, 2, 3. Ese fue el mismo año que recibió una nominación al Grammy a la mejor cantante revelación.
En Three Packs a Day, en español…3 paquetes al día, Barnett no se refiere a los cigarrillos, sino más bien a los artistas emergentes hambrientos en todas partes que se mantienen a base de sopa instantánea con noodles. Subsistir con los fideos de la tienda de un dólar no es un estilo de vida ideal, pero Barnett lo hace sonar positivamente lujoso con letras que parecen haber salido de algún cómic y contra un telón de guitarras de fondo. Las letras no tiene desperdicio y están cargadas de sarcasmo e ironía…entre otras cosas nos dicen: “No puede ser cierto que usen pegamento para mantener los fideos pegados”.
