Cállate y déjame irme. Más claro imposible. Así lo canta este dúo de Manchester.
George Michael en este tema, otro más de tantos que lanzó en una época, dejó claro su cambio de identidad ante el mundo.
Esa necesidad de tener otro cuarto de baño más. Para así darse una ducha que dure algún segundo más.
Una canción que parece tonta. Pegadiza. Pero que está llena de crítica social.
Una tormenta perfecta entre una atmósfera eléctrica y unas letras profundas.
De pequeño supo lo que era mudarse de casa en casa en Chicago. Quién sabe si acordándose de aquellos años compuso este Move On Up.