Hoy en este especial Música Ciega es inevitable rendir también homenaje a quien quizás fue el cantante pionero que señaló el camino que se podía recorrer a otros. Hablo de RAY. Sí, RAY CHARLES. Uno de los pocos en cruzar todo tipo de estilos musicales sin despeinarse. Del jazz al pop, del blues al soul y del gospel al country y tiro porque me toca.
De su vida no hace falta dar muchos detalles. Pero si tienes curiosidad te recomiendo que veas, si es que no lo has hecho ya, la película biográfica RAY del año 2004. Allí Jamie Foxx borda al cantante en una interpretación que, de hecho, fue premiada con un Oscar.
Esta semana estuve dudando qué canción poner para representar la música de RAY CHARLES. En JUKEBOX ya sonó HIT THE ROAD JACK hace unas semanas. Tampoco quería poner otros temas muy conocidos como WHAT’D I SAY con su reconocible coro, o la romántica I CAN’T STOP LOVING YOU o su actuación en la película de los BLUES BROTHERS.
No, quería una canción que representara realmente lo que RAY CHARLES aportó al mundo de la música. Y así es como di con este MAKIN’ WHOOPEE. Verás. El tema no es de él. Es uno de esos que se llaman estándar. Que fueron compuestos años antes de que incluso naciera. Y que habían cantado muchos otros antes que él. Pero llega RAY CHARLES y le da de repente una nueva lectura.
La letra de la canción no engaña a nadie. Es una forma nada sutil de advertir a futuros navegantes sobre las consecuencias del matrimonio. Estamos en los años 20 del siglo XX. Así que te puedes imaginar que la letra destila machismo. Y lo que advierte es de todas esas etapas que tienes que atravesar para al final lograr hacer whoopeeeee. Una palabra con la que el oyente entiende que se refiere a acostarse con alguien. Pero al evitar decirlo sin tapujos, el autor de la canción y sus futuros intérpretes se pueden permitir saltarse la censura.
Pues bien, aquí RAY CHARLES en una actuación en directo se pone a tocar el tema. Primero acaricia, juega, introduce la canción con el piano. Luego canta, casi narra la historia de la canción dándole ese toque picarón que otros no quisieron o no pudieron darle. El público responde al desafío con risas, aplausos… y el cantante se crece. Lo que estás a punto de escuchar es una actuación al más puro estilo explosivo RAY CHARLES. Un diálogo público – artista del que salían sus mejores interpretaciones. MAKIN’ WHOOPEE…