Estaba pensando que a cuento de la banda californiana que te comentaba, Sublime, ya tengo planazo para la semana que viene. Dosis de Reggae-Ska…stay tune.
Y vamos con la tercera canción de verano alternativa. ¿Qué tal si nos metemos en el DeLorean de la película Regreso al Futuro? ¿Qué tal si viajamos al verano de 1968 en la máquina del tiempo?
Summer ’68 es una de esas maravillas acústicas, una de esas canciones que uno debe escuchar antes de palmar. La escribió y la canta Richard Wright, David Gilmour a la guitarra, Roger Waters al bajo y Nick Mason a la batería.
Estos cuatro músicos grabaron Summer ’68 en los míticos estudios Abbey Road de Londres. Incluyeron la pista dentro de su quinto álbum de estudio, el LP se llamaría Atom Heart Mother. La banda es Pink Floyd, cuando Pink Floyd chorreaba rosa por sus cuatro costados.
Líricamente, la canción se centra en el estilo de vida del rock and roll que había adoptado Pink Floyd por aquel entonces, pero Wright canta sobre esto con un tono de aburrimiento e indiferencia, como si se hubiera vuelto insensible, y está claro que echa de menos su antiguo estilo de vida.
La letra es genial, pero es en la estructura musical donde realmente brilla la canción. El comienzo es una hermosa balada cantada por Wright. Luego, se agrega la segunda capa, que es una sección psicodélica extremadamente pesada.
Luego viene un coro pop al estilo Beach Boys y finalmente Summer ’68 se cierra con trompetas orquestales y piano clásico, todo en una canción corta que la mayoría de los fanáticos de Pink Floyd pasan por lo alto por completo.
En mi opinión, es una canción absolutamente fenomenal y una de mis esenciales de una de las bandas que más admiro, Pink Floyd.