Lo que viene ahora es toda una curiosidad musical. Pero, por supuesto, con salto de estilo incluido, que es el tema que protagoniza hoy JUKEBOX. Y, en concreto, un salto que lleva al compositor pop más exitoso del siglo XX a querer componer su primera obra de música clásica.
PAUL MCCARTNEY en el año 1991 sacó adelante un capricho, una aventura musical completamente diferente a lo que nos tenía acostumbrados a media Humanidad.
El ex-Beatle quería componer un oratorio de ocho movimientos al que llamó LIVERPOOL ORATORIO. La obra tiene forma de biografía y retrata la vida de un alter ego del compositor al que aquí llama SHANTY. En una de esas etapas de su vida, la del colegio, recibe clases de español. Y aquí es donde MCCARTNEY incluye una pieza basada en una canción infantil que él mismo aprendió de pequeño en el colegio llamada TRES CONEJOS. Y que todavía recuerda en los conciertos que da en los países de habla hispana, como puedes ver en el siguiente vídeo…
Pues bien, en este desafío musical que se plantea el compositor de crear toda una obra de música clásica, guarda un hueco para una pequeña pieza que se inspira en este recuerdo lejano en español. La obra se estrenó, cómo no, en su ciudad natal de Liverpool. Y fue su forma de homenajear a la Royal Liverpool Philarmonic Orchestra que en ese año celebraba su 150 aniversario.
De toda esa obra que, por cierto, no fue muy bien recibida por la crítica especializada en música clásica, nosotros nos quedamos con este sorprendente fragmento que no llega a los dos minutos en el que un coro infantil canta TRES CONEJOS.
